CLASES DE PILATES EN GIJÓN
Como decía Joseph Pilates, el creador de la disciplina “Pilates es la coordinación completa del cuerpo, la mente y el espíritu”. Es una manera de hacer ejercicio muy completa, en la que los resultado son visibles y además…¡Es divertido!.
7 RAZONES PARA PRACTICAR PILATES SEGÚN SU CREADOR
El Pilates, como la disciplina que es, tiene un sistema estructural de ejercicio y prácticas que reposan sobre las ideas de su creador sobre mantener la salud y un cuerpo joven y activo. No hay nada más inspirador que sus propias palabras para animarnos a probar este deporte que es casi una forma de vida.
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Cada momento de nuestra vida puede ser el comienzo de grandes cosas.
Para dar el paso de cuidarnos y de probar algo nuevo como puede ser el Pilates, cualquier día es el indicado.
Si estás buscando clases de Pilates en Gijón, en nuestra Sala Garden, no hay plazo cerrado para incorporarte a los grupo de pilates, tanto de mañana como de tardes. Es habitual que tomemos este tipo de decisiones en septiembre (con el comienzo del curso escolar) o en enero (con los típicos propósitos de año nuevo) pero cualquier momento puede ser el adecuado. Para darle un giro a tu salud y a tu bienestar no tienes por que esperar a una fecha “especial”.
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Si tu columna está inflexiblemente rígida a los 30, eres viejo. Si es completamente flexible a los 60, eres joven.
Esta frase me encanta, y me parece una verdad indiscutible. Un cuerpo joven que tiene una vida sedentaria, un trabajo en el que pasa horas sentado y un ocio con poco movimiento, se “siente” mucho mayor de lo que realmente es.
La edad metabólica es un índice de la edad que tiene nuestro cuerpo que a veces no se corresponde con la edad cronológica, los años que tenemos. Con ejercicios como el Pilates podemos ayudar a que vaya pareja a nuestra edad real.
Alumnos habituales de pilates de más edad se sienten ágiles, con su masa muscular en buen estado y notan beneficios como cansarse menos en el día a día, como si su cuerpo fuese más joven.
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El Método Pilates te enseña a tener el control de tu cuerpo y no a su merced.
La sensación de que queremos hacer algo y nuestro cuerpo no nos “responde” es de las más frustrantes que podemos experimentar.
Acordarnos de cuando podíamos hacer un mayor esfuerzo físico, y ya no nos es posible, es algo que afecta también a nuestro bienestar emocional. Ganar resistencia y flexibilidad sobre la esterilla de pilates se traslada a todos los actos cotidianos donde vamos a ver como recuperamos el control sobre nuestro cuerpo.
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Respirar es el primer acto de vida y el último.
Nuestra vida misma depende de ello. Como no podemos vivir sin respirar, es trágicamente deplorable contemplar a los millones y millones que nunca dominaron el arte de respirar correctamente. Respiramos sin darnos cuenta, de manera automática. Y eso es genial porque nos facilita la supervivencia, pero tiene un aspecto no tan positivo.
Al hacerlo inconscientemente, no controlamos nuestras respiraciones. Tenemos tendencia a que las respiraciones sean cortas, no llenamos nuestros pulmones a su máxima capacidad y eso tiene sus consecuencias.
Las respiraciones cortas se vuelven agitadas y nos sentimos más cansados, además de más nerviosos.
Controlar las respiraciones, respirar de manera consciente y con unos ritmos determinados son ejercicios habituales en el control de la ansiedad y para cuando estemos pasando por momentos estresantes.
El control de la respiración está incorporado a la practica del pilates, es, de hecho, una parte muy importante del mismo. Con cada sesión irás reconociendo más los patrones de respiración que tienes y no son correctos y podrás ir mejorándolos sin apenas darte cuenta.
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En 10 sesiones sentirás la diferencia, en 20 verás la diferencia y en 30 tendrás un cuerpo nuevo.
Poder estirarte más grácilmente, empezar a ver más definición en brazos, piernas y abdomen y finalmente encontrarte con una figura que no reconocerías unos meses atrás.
En pilates notas un progreso REAL. Y no necesitas más que seguir las clases con regularidad.
La paciencia y la persistencia son las dos armas para lograr que en esas 30 sesiones que Joseph Pilates decía tu cuerpo parezca otro. Y no hablamos solo en el sentido superficial del físico. Tu aspecto cambia, si, pero el cambio más importante lo notarás en la sensación de bienestar durante el día.
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Unos cuantos movimientos bien diseñados, correctamente ejecutados en una secuencia equilibrada, valen horas de hacer calistenia descuidada o contorsión forzada.
Pilates es un método bien pensado, estructurado y con indicaciones claras. Muchas veces a lo largo de nuestra vida hemos hecho ejercicio pero sin seguir un planteamiento bien planificado y con unos objetivos claros.
Siguiendo las indicaciones de la persona que imparte la clase estamos trabajando con un fin claro, trabajamos todo el cuerpo sin olvidarnos de ninguna parte, sin descompensarlo.
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Cada uno es el arquitecto de su propia felicidad.
La practica del pilates depende, en ultima instancia de tí y solo de ti. Eres tu quien va a marcar la intensidad de una sesión. Quien va a pedirle a su cuerpo el esfuerzo, quien va a ir a cada clase.
Y esto es muy gratificante, porque implica que los resultados serán 100% tuyos. Que esa mejor en tu forma física, en tu ánimo y en la elasticidad y resistencia que has ganado son gracias a ti.
¿Quieres practicar pilates para encontrarte mejor? Perfecto, sólo dependes de tus ganas, sin equipamientos carísimos y se practica en interior. Esto último es perfecto vivas donde vivas, porque vas a poder practicarlo durante todo el año.
Estas reflexiones, que tienen mas de medio siglo siguen siendo actuales. El Pilates ha ganado mas y mas practicantes en todo el mundo porque es un ejercicio agradable, de bajo impacto y con resultados visibles.
Incorporamos clases a nuestro espacio porque valoramos muy positivamente sus beneficios en el cuerpo y en la mente. Esa mezcla de cansancio y felicidad después de las sesiones es algo que tienes que experimentar.
Si estás buscando clases de Pilates en Gijón, puedes escribirnos por WhatsApp o llamarnos al número de teléfono 644571767 y pedirnos una clase de prueba. Si nunca lo has practicado o hace tiempo que no lo realizas una clase, te animamos a que nos preguntes por ellas. ¡Nos vemos en la esterilla!
