EL YOGA SUTRA DE PANTAJALI SOBRE LA POSTURA: STHIRA SUKHAM, ASANAM
Este yoga sutra de Patanjali nos dice que la postura (asanam) debe ser estable (sthira) y cómoda (sukham). En el post de hoy, analizamos que nos enseña este importante sutra.
Cuando estamos dentro de un asana, buscamos sentirnos estables y en equilibrio, sin temblores, sin movimientos descoordinados porque dudemos de cómo colocarnos. El equilibrio físico sólo es posible si el interior está en calma.
En la practica de yoga, intentamos estar presentes, centrad@s en realizar los movimientos precisos. Uno de los objetivos está en sentirnos dentro la asana como en casa, tranquil@s, confiad@s y segur@s.
1. YOGA Y ATENCIÓN PLENA
Si nuestra mente está un poco dispersa, nuestros movimientos serán mas erráticos, menos limpios y no conseguiremos esa sensación de estar bien enraizad@s en la esterilla.
Aunque la atención plena pueda parecer que sólo se alcanza en estados meditativos, sentad@s en el suelo y sin movernos, la práctica física del yoga nos pide llevar esa disposición con nosotros durante la sesión.
Una vez que salgamos de la esterilla, lo ideal sería que esa capacidad de conectar con el momento presente pudiese acompañarnos a diario.
2. LA DELGADA LINEA EN EL YOGA ENTRE ESFORZARNOS Y FORZAR
Respecto a la idea de estar cómod@s en un asana, podríamos pensar que cuando nos encontramos en posiciones a las que no estamos acostumbrad@s a hacer a menudo, a gusto, lo que se dice a gusto no estamos.
Si sentimos que nuestra flexibilidad está en horas bajas y nos imaginamos haciendo Hanumanasana (el asana donde estiramos una pierna hacia delante y otra hacia atrás mientras mantenemos el tronco erguido, AKA el spagat) podemos pensar que no voy a estar cómod@s.
¿Eso quiere decir que no tengamos que esforzarnos en ajustar una postura si nos resulta difícil? Al contrario. La práctica de yoga sólo puede crecer si cada vez que estamos encima de la esterilla, lo hacemos con concentración e intención de trabajar y avanzar.
En un asana buscamos aproximarnos a nuestro limite sin sobrepasarlo evitando, llegar a un punto de conflicto en la postura.
La delgada línea entre intentar llevar nuestro cuerpo un poco más allá y sentir dolor al hacerlo no debe cruzarse.
El yoga no es competición, no tenemos que demostrar nada a nadie ni al profesor/a, ni a los compañer@s, ni a otros practicantes de yoga. Tenemos que trabajar en nuestra esterilla pero sin sufrir.
3. YOGA ES CRECER Y EVOLUCIONAR
Al comienzo de nuestro viaje en el yoga encontraremos comodidad durante poco tiempo mientras permanecemos en el asana. Y cuando vayamos ganando experiencia, veremos como esa sensación de comodidad aumenta a medida que vamos encontrando la forma de ajustar la postura.
Antes de correr necesitamos aprender a andar correctamente y con firmeza.
Puede ser fácil dejarnos seducir por un asana mas avanzado, pero no debemos olvidarnos de asentar las bases de una buena práctica. Con ellas, nos aproximaremos con más seguridad a mayores desafíos.
La practica va de la mano de la respiración y de la constancia. Fluyamos entre los asanas, reconociendo como está nuestro cuerpo en ellas, disfrutándolo, sintiendo nuestra postura estable y manteniéndonos en ella de manera confortable.